sábado, 4 de junio de 2011

Sábado disfuncional

Y no es uno, son todos mis sábados iguales. No sé por qué pero ya me acostumbré a salir sólo los viernes en la noche, al lugar que sea, da lo mismo, lo que me gusta es salir y reír un rato. Generalmente las noches terminan a las 5 de la mañana y tiendo a quedarme en las casas de mis amigas.
Entonces despierto en un lugar que no es mi cama y lo único que quiero es arrancar a mi casa para dormir bien pero no duermo.  Llego a casa y nunca hay nadie, mi hermano sale con mi papá y por alguna razón nunca me invitan: "son cosas de hombres" (tampoco me motivan mucho), mi mamá después del trabajo de media jornada a veces se toma un tiempo para ella (se lo merece), la única alma presente es mi fiel Sofía. No hay momentos más plenos que estar sola, y me apodero del sábado, que es mi domingo chico,  procedo a la rutina: me baño, me pongo el pijama de polar, bajo por un té y me entrego al pc. Nunca sé que voy a almorzar, ni tampoco que hacer, puede que vague por mi casa, quizás vea una película, regaloneo con la Sofi, miro el techo, pienso cosas, etc. 
Pero no sé por qué este sábado me dieron ganas de hacer algo distinto, levantarme y salir a sacar fotos, ir al super a comprar algo rico para cocinar, me dieron ganas de conversar, de escribir, de caminar, no sé. Me cuestioné todas las cosas que podría hacer pero no hago, y si no las hago es por que no hay una motivavión. Definitivamente tal vez me aburrí de mis sábados disfuncionales. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario